El animador coreano Kim Jong-il nos propone su última animación basada en las influencias del ballet acuático y la inolvidable Esther Williams (+). Con una depurada técnica logra sensaciones hiperrealistas que enganchan al espectador.
Este otro no tiene ninguna gracia y muestra las torturas a una mujer norcoreana.
jueves, 8 de noviembre de 2007
Kim Jong-il
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario