jueves, 22 de noviembre de 2007

Jorge, Teddy y LISI


Fin de semana último: "No pasa nada. Podéis bajar lo que queráis del eMule. Pero no lo vendáis". La frase es de Jorge Martín, jefe del Grupo de Seguridad Lógica de la Brigada de Investigación Tecnológica de la Comisaría General de Policía Judicial durante su ponencia en el Congreso de Webmasters celebrado en Madrid.

Y es que todavía es necesario seguir insistiendo en ello: descargar, copiar, compartir e intercambiar archivos sin ánimo de lucro no es delito. Así lo dice la ley y así lo confirman las sentencias judiciales en los últimos años. La cosa es que el bueno de Jorge dijo, a una audiencia que respondió con aplausos, lo que muchos Torquemadas de internet saben pero continúan ocultando, que los piratas no son los que están en sus casas, que los piratas están en despachos que se abanderan adalides de la cultura y la propiedad intelectual. A Jorge le han dado un toque y ahora matiza que sus palabras fueron a título personal. O sea que en su casa también se descarga, digo yo.

A propósito de piratas. Como consecuencia de la "Operación Guateque" en el Ayuntamiento de Madrid, la SGAE se ve salpicada por un supuesto pago de favores para conseguir la licencia de un cine. "No necesitamos eso" dice Teddy Bautista, cabeza del entramado millonario, con unas prácticas recaudatorias harto abusivas y opacas. Y como las sospechas sobre ella se acentúan cada día más y las noticias se suceden en cascada, va la Asociación de Internautas y la de usuarios y la de las empresas de informática y la de los hosteleros víctimas del canon y le ponen una demanda a Teddy y su monopoly por supuestas "ilicitudes cometidas en la gestión económica de los recursos de la Sociedad General de Autores y Editores". ¡Toma ya!, el mundo al revés, los piratas exigiendo legalidad a quien presume de tenerla, supuestamente.
Actualización: La SGAE envida y mueve ficha denunciando a los denunciantes.

El Gobierno y casi todos los partidos políticos han permitido al lobby campar a sus anchas y el monstruo ha crecido mucho y mal. A cambio nos aprobó hace poco la LISI, Ley de Medidas de Impulso de la Sociedad de la Información, a cambio ha elaborado un texto que, de enrevesado, la internet española se ha visto necesitada del asesoramiento en leyes y el dictamen es malo, muy malo. Tras una aparente exclusividad de los jueces para secuestrar y cerrar webs, en realidad se esconden líneas en el articulado que sigue dejando en manos de la "autoridad competente" su control. La tan mentada Constitución y el derecho a la libre expresión siguen sin estar claramente reguladas en internet. Feo panorama.

No hay comentarios: