Espacio Tangente

Estos días pasados el Espacio Tangente ha celebrado su sexto aniversario entre tartas, vídeos, exposiciones y conciertos. Seis años de amor y pasión por el arte, amante escurridizo, que cuanto más le llamas más se aleja.
El Espacio y por extensión aquellos sitios donde la gente de vivir diferente se reúnen, puede parecer como un motel de carretera, un sitio por el que pasas deprisa y mirando su puerta te preguntas que secretos guarda, que abrazos esconde, que palabras susurradas se quedaron flotando entre sus paredes.
Sin embargo no es el caso, su puerta siempre está abierta a todos por que de todos es. Fundado en el periodo de Olivares debe, desde el cambio, sobrevivir con las migajas que la concejalía conservadora de turno les regatea. Como aguanten toda la legislatura que nos queda, serán licenciados con nota alta.
El Espacio es bonito, grande, luminoso. Es social y comunitario. Es referencia burgalesa en el arte tangencial (que toca) y escuela sin ujieres para tantos y tantos jóvenes con la sed y la fiesta de la vida.
No receles y entra, no mires y digas que no entiendes nada porque no hay nada que entender, no desconfíes del arte nuevo porque nunca fue nuevo. Llevamos haciendo lo mismo desde Atapuerca, solo que envuelto en títulos y palabras.
Que cumplan muchos más y yo que lo vea.